Como en otros años, a pesar de las muchas debilidades que presenta el proyecto de Presupuesto del Estado para 2017, resulta imperativo en aras de la certeza jurídica que se proceda a su discusión y su consiguiente aprobación, principalmente por razones de transparencia, eficiencia y gobernabilidad; de lo contrario, se generaría opacidad y confusión en la ejecución del gasto público. Conviene resaltar algunas conclusiones derivadas del análisis que ATAL realizó del proyecto de Presupuesto para el próximo año y que convendría que la Comisión de Finanzas Públicas tome en cuenta a la hora de analizarlo y aprobarlo.